Tener una mascota es muy beneficioso para los niños, mejora su humor y promueve su desarrollo en muchos aspectos importantes de la vida,los niños que tienen mascotas en su hogar son más felices, sociables y sufren menos de estrés, son más alegres y menos sedentarios, dejando de lado los videojuegos y dedicándose más a los deportes y actividades físicas con sus amigos y sus mascotas.
Algunos de los beneficios específicos son:
La relación de los más pequeños con sus mascotas les facilita el trabajo de expresarse libremente.
Mejora su sentido de responsabilidad: es bueno estimular a los niños para que ellos se hagan cargo de algunas de las responsabilidades de sus mascotas como, alimentarlos a horas determinadas, preocuparse del aseo del lugar donde duermen, sacarlos a pasear, etc. Lo importante es ayudarlos en el proceso y enseñarles que se trata de un ser vivo que depende de sus cuidados y amor.
Les ayuda a expresar emociones: si tienes algún hijo/a que le cuesta expresar sus emociones, la relación con sus mascotas les facilita el trabajo de expresarse libremente. Comprenden como entregar el afecto, a desarrollar la paciencia, el amor al prójimo y cuidado de otros seres vivos.
Facilita la sociabilización: el tener una mascota puede ayudar a los niños a desarrollar conductas positivas, como el respeto por los demás, la confianza en sí mismo, la confianza en los demás, lo que trae como resultado una mayor interacción con los demás. Además incentiva a los niños a pasar menos horas de actividades sedentarias.
Favorece un mejor estado físico:los niños que tiene mascotas (especialmente perros) tienen menos posibilidades de ser obesos, ya que estos los incentiva a jugar, correr y estar en contacto con la naturaleza.
Entender mejor los procesos de la vida: el tener una mascota puede servir para que los niños entiendan mejor los ciclos de la vida, como por ejemplo: que la alimentación es fundamental para la vida, o el proceso de la muerte, al que algunas veces hay que enfrentar dependiendo del tipo de mascota que elijan, ya que hay animales que viven menos años que otros.
Lo importante como padres es elegir la mascota adecuada para cada niño y apoyarlos en el proceso, involucrándose en sus cuidados. Esta actividad permitirá acercarnos aún más a los niños y entenderlos de mejor manera.