Las mujeres que optan por beber agua en lugar de bebidas dulces, como refrescos o jugos de fruta, tienen un riesgo algo más bajo de desarrollar diabetes.
Un estudio dirigido por el Dr. Frank Hu, profesor de la Facultad de Salud Pública de Harvard, realizado a más de 80.000 mujeres seguidas durante una década sugiere que agregar agua a las bebidas dulces del día no hace la diferencia, pero que reemplazarlas con agua permite prevenir la diabetes tipo 2..
Las bebidas dulces refuerzan el riesgo de desarrollar diabetes, explica el Dr. Hu, por eso se recomienda beber agua en lugar de las bebidas azucaradas y la pregunta es si ese tipo de sustitución influye de alguna manera en la aparición de diabetes.
El estudio incluyó a 82.902 mujeres, que habían respondido sobre la alimentación y la salud durante 12 años. En ese período, unas 2.700 desarrollaron diabetes.
Cada vaso diario de bebidas y jugos de frutas azucarados estuvo asociado con un 10% más riesgo de desarrollar diabetes.
El equipo estimó que al reemplazar un vaso de refresco o de jugo por uno de agua, el riesgo de desarrollar diabetes disminuye un 7-8%.
Un 10% de las estadounidenses (o 12,6 millones) padece diabetes. Una reducción del 7% significa que serían diabéticas nueve de cada 100 mujeres en lugar de 10 de cada 100.
El estudio se publico en American Journal of Clinical Nutrition.
Los autores estimaron que reemplazar un vaso de refresco o de jugo de fruta con una taza de café o té reduce entre el 12 y 17% el riesgo de desarrollar diabetes.
Fuente: American Journal of Clinical Nutrition