Todos nos preocupamos por ahorrar para el futuro, ahora, los “bancos de grasa” permiten conservar células de tejido adiposo para usarlas en el futuro, principalmente en procedimientos de cirugía plástica.
El procedimiento implica extraer la grasa de las personas mediante liposucción y congelarlas para usarlas con posterioridad en caso de necesitar la inyección en determinada parte del cuerpo como los párpados inferiores u otras zonas que requieran de un relleno para erradicar las arrugas que se hacen presentes con el paso del tiempo. Se considera que el procedimiento de inyección de grasa tiene una duración de aproximadamente una hora.
Los costos de almacenamiento de grasa varían de acuerdo con cada banco, pero en promedio tienen un costo de 1000 dólares estadounidenses al año.
En Inglaterra, también se cuenta con bancos de células grasas para ser usadas en cirugías cosméticas.
Si bien la idea de congelar la grasa suena atractiva en la teoría, algunos consideran que aún no se tiene la plena seguridad de la eficacia de las células después de su congelación. El Dr. Daniel Del Vecchio, un cirujano plástico del Massachusetts General Hospital afirma que en modelos animales las células de grasa congeladas no dan los mismos resultados que las células de grasa frescas y considera que los procedimientos de cirugía plástica en la cara requieren de una cantidad muy pequeña de grasa que puede extirparse en el momento de alguna parte del cuerpo del paciente.
Habrá que esperar un tiempo para conocer a fondo los beneficios tanto económicos como físicos de la congelación de las células de grasa.