Se aprobaron en Australia nuevas normativas estrictas para la venta de cigarrillos, que se espera cuestionen las tabacaleras locales, temerosas de que la ley se extienda y golpee su negocio en otros sitios.
La cámara alta del parlamento australiano aprobó un paquete de reformas que exigen a las marcas de cigarrillos retirar el logo de las cajetillas, que a partir de diciembre de 2012 serán color verde oliva.
Sí podrán mostrar imágenes gráficas del daño que provoca el tabaco a los fumadores.
Las reformas australianas son seguidas de cerca por algunos gobiernos que consideran políticas similares en Europa, Canadá y Nueva Zelanda.