Millones de personas en EUA padecen una enfermedad de transmisión sexual, según un informe de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, y la mitad de las nuevas infecciones de cada año se dan en los jóvenes. Esta es una nueva y aleccionadora estadística del gobierno sobre la salud sexual de los adolescentes, los expertos estiman que el número de infecciones transmitidas sexualmente en la actualidad es de más de 110 millones.
Para realizar el estudio se calcularon las estimaciones de prevalencia y los costos para tratar las enfermedades de transmisión sexual (ETS).
Uno de los hallazgos más preocupantes fue que cada año se producen casi 20 millones infecciones nuevas, y la mitad de las veces se trata de jóvenes de 15 a 24 años de edad.
El análisis, realizado por investigadores de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EUA, consideró ocho tipos de enfermedades de transmisión sexual, tuvieron en cuenta la clamidia, la gonorrea, el virus de la hepatitis B (VHB), el virus del herpes simple tipo 2 (VHS-2), el VIH, el virus del papiloma humano (VPH), la sífilis y la tricomoniasis.
Algunas de estas infecciones pueden provocar problemas de salud graves que van desde la infertilidad al dolor crónico de pelvis, el cáncer cervical, aunque las mujeres tienden a sufrir mayores consecuencias por este tipo de enfermedades, los hombres y las mujeres jóvenes se infectan en igual medida.
Las infecciones transmitidas sexualmente son un riesgo importante para las personas que mantienen una vida sexualmente activa, algunas de estas infecciones pueden transmitirse mediante el contacto con la piel.
La Dra. Jill Rabin, jefa de uroginecología del Centro Médico Judío de Long Island, comenta que se debe establecer una relación abierta y honesta con su médico, actualmente se puede hacer una evaluación con solo realizar unas pocas pruebas sencillas.
Los hallazgos refuerzan la necesidad de fomentar la prevención y la evaluación, y los jóvenes deben ser el objetivo prioritario de tal esfuerzo. Los resultados del estudio se publicaron en la revista Sexually Transmitted Diseases.
Las recomendaciones actuales para la evaluación de las enfermedades de transmisión sexual son:
•Todo el mundo se debe realizar una prueba del VIH.
•Todas las mujeres activas sexualmente de hasta 25 años de edad y las mujeres mayores de 25 con factores de riesgo como el hecho de tener una nueva pareja sexual o varias deben realizar las pruebas de clamidia cada año.
•Una mujer activa sexualmente en una situación de riesgo debería realizar las pruebas de gonorrea cada año.
•Las mujeres embarazadas deben realizar las pruebas de sífilis, VIH, clamidia y hepatitis B, y las embarazadas en situación de riesgo deberían realizar las pruebas de gonorrea en su primera visita prenatal.
•Todas las mujeres infectadas por el VIH deben realizar la prueba de tricomoniasis.
•Todos los hombres gays y bisexuales sexualmente activos deberían realizar las pruebas al menos una vez al año de sífilis, clamidia, gonorrea y VIH. Aquellas personas con múltiples parejas sexuales o desconocidas debería realizar las pruebas de las ETS con mayor frecuencia (preferiblemente, en intervalos de 3 a 6 meses). Además, las personas que también consumen drogas ilegales, y en concreto metanfetaminas, o cuyas parejas consumen drogas deberían realizar las pruebas más a menudo.
Fuente: U.S. Centers for Disease Control and Prevention