El astigmatismo – «visión borrosa»- es un padecimiento refractivo ocasionado por una alteración en la curvatura de la córnea, que es la cubierta transparente en la parte frontal del ojo, lo que impide una visión normal.
A diferencia de la Miopía, que es la dificultad para ver de lejos y la Hipermetropía que implica dificultades para ver de cerca, en el Astigmatismo la visión es deficiente de cerca y de lejos.
Se estima que a nivel mundial, 50 millones de personas padecen algún tipo de problema refractivo. De ellos, el 20% enfrenta Astigmatismo
Los síntomas más comunes de este padecimiento, son:
* Visión deficiente
* Dolor de cabeza
* Cansancio ocular, originado por el esfuerzo constante que hace el ojo para enfocar correctamente.
No existe una causa conocida para este padecimiento, sin embargo en muchas ocasiones se encuentra asociado con otros problemas refractivos, como la miopía: Se diagnostica mediante un examen oftalmológico que determina la agudeza visual, para ello se utiliza la Cartilla Snellen, que consiste es una tarjeta con letras en diferentes tamaños, también se utiliza el Refractómetro que es un equipo que cuenta con lentes de diferentes graduaciones, a fin de conocer el más adecuado para cada paciente. También es recomendable someterse a un estudio de fondo de ojo, a fin de descartar otras enfermedades.
En muchos casos el astigmatismo esta presente desde el nacimiento y de no atenderse, puede agudizarse con el paso del tiempo.
El tratamiento consiste en el uso de anteojos o lentes de contacto que permitan contar con una visión adecuada. Actualmente existen los procedimientos láser, que permiten superar esta característica de manera definitiva.
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