En un estudio reciente realizado por la Dra. Joelle Brown, de la University of California, en Los Ángeles EUA, 2 tercios de las mujeres, habían utilizado limpiadores, lubricantes y jalea de petróleo intravaginales y algunos de esos productos estuvieron asociados con un aumento del riesgo de padecer infecciones vaginales.
Las infecciones vaginales comunes que causan las levaduras y bacterias, así como el uso de algunos productos, lesionan el tejido vaginal y elevan la vulnerabilidad a enfermedades de transmisión sexual, como el herpes, la clamidia y el VIH. Las mujeres deben saber que existen cada vez más pruebas de que algunos productos que se colocan en la vagina lesionan el tejido, lo que aumenta el riesgo de padecer vaginosis bacteriana e infecciones de transmisión sexual, comenta la Dra. Brown, se están dañando a sí mismas con el uso de la gran mayoría de los productos que están usando por consejo de madres y amigas.
Para realizar el estudio la Dra. Brown y su equipo convocó a 141 mujeres de Los Ángeles que respondieron un cuestionario sobre los productos que utilizaban y aceptaron hacerse análisis para detectar infecciones vaginales al inicio del estudio y un año después. El 66% dijo que se había higienizado, se había dado duchas o había usado lubricantes u otros productos de venta libre, distintos a los tampones, el mes anterior. El 45% de las usuarias de productos intravaginales utilizaba jabones comerciales o mezclas de vinagre y agua. Los productos más utilizados eran los lubricantes sexuales: el 70% de las usuarias optaba por versiones comerciales, el 17% prefería la jalea de petróleo y el 13% usaba aceites.
Los análisis de laboratorio revelaron que las usuarias de productos que no debían introducirse en la vagina, como los aceites y el petrolato (Vaselina), eran más propensas a tener infecciones por levaduras y bacterias.
El 40% de las mujeres que usaba jalea de petróleo como lubricante vaginal tenía vaginosis bacteriana, una infección que aparece por distintas especies de bacterias, comparado con el 18% de las mujeres que no tenían esa costumbre. Y el 44% de las mujeres que usaban aceites intravaginalmente tenía infección por Candida, el hongo responsable de las infecciones por levaduras, comparado con el 5% de las mujeres que no usaban aceites.
Los autores sugieren que el aumento del riesgo de padecer esas infecciones comunes surgiría de los productos que alteran el pH interno y la comunidad de microbios beneficiosos para la salud, lo que permite que proliferen los organismos dañinos.
Los resultados del estudio se publicaron en la revista Obstetrics & Gynecology. Los médicos no recomiendan las duchas o los lavados vaginales porque alteran el equilibrio de la flora bacteriana, sin un beneficio aparente. La Dra. Brown explica que la Administración de Alimentos y Medicamentos de EUA «insta fuertemente» a los fabricantes de cosméticos a evaluar la seguridad de los productos, pero no lo exige.
Fuente: Obstetrics & Gynecology