Los juguetes sexuales, o juguetes para adultos permiten el desarrollo de la sexualidad y generan novedades a la actividad sexual que en ocasiones se vuelve monótona con el paso de los años.
Un Juguete sexual es un objeto que sirve para aumentar el placer del sexo en pareja o para autocomplacerse.
El segmento del erotismo ecológico seduce al mercado francés, lo que para algunos significa un placer responsable, para otros es puro marketing, las cápsulas afrodisíacas biológicas, los vibradores sin plásticos nocivos, nuevos lubricantes naturales son algunos de los nuevos productos.
En el sector erótico-ecológico existe un nicho más interesante que en el de cosméticos orgánicos convencionales, la empresa Divinextases, lanzó hace dos años la primera marca totalmente orgánica de cosméticos eróticos.
La empresa realiza sus ventas online, y su eslogan es «naturaleza y progreso».
Entre sus productos está el bálsamo para después de los azotes, perfumes íntimos hechos a base de aceite de karité o cera de abejas,y todos los materiales de embalaje son reciclables.
Más del 80% de los productos en el mercado usan moléculas de Viagra que pueden ser peligrosas para algunas personas mayores, otras marcas especializadas en suplementos alimenticios cosméticos, sólo utilizan polvos vegetales biológicos, como el tríbulo (Tribulus terrestris), un estimulante de la potencia sexual, o la maca (Lepidium meyenii), un tónico reconstituyente
El «green business» a la hora del sexo trata de complacer a los amantes, pero también a los defensores de la naturaleza.
También se venden condones éticos de carbono neutro, fabricados en Alemania con látex natural de bosques en India gestionados de forma sostenible, el bosque es un tema preferido también en el sitio web arbredesplaisirs.com, una boutique online de juguetes sexuales, lencería sugestiva y lubricantes varios, que declara plantar un árbol en Perú para la reforestación de la Amazonia por cada compra, e invita a los clientes a reciclar sus accesorios sexuales.
Esta plataforma en Internet también limita su oferta a juguetes sexuales libres de ftalatos, una sustancia utilizada para ablandar el plástico que supone un riesgo para la salud.
Se planea fabricar vibradores sin plásticos nocivos, que funcionen con energía solar.
