Es una figura típica pensar que los hombres quieren sexo y las mujeres quieren ser abrazadas, pero esto (ya) no es tan cierto, de acuerdo a un estudio del Kinsey Institute, que descubrió que el abrazarse era el indicador que más fuertemente podía predecir la felicidad de los hombres en una relación, y que la satisfacción sexual era el indicador más fuerte para las mujeres.
Las personas tienden a pensar que a los hombres les importa más el sexo y que las mujeres se preocupan más de ser abrazadas, comenta el psiquiatra Raymond Rosen, investigador del New England Research Institutes, quien afirma que descubrieron que esto es solamente un estereotipo.
Una buena relación usualmente resulta en buenas relaciones sexuales, lo cual podría explicar la conexión, ella tendrá mejor sexo si no eres egoísta y te preocupas por complacerla en la cama, y estas cualidades te pueden hacer un mejor novio o esposo en general.
El otro lado de la moneda es que a ellas también les importa el sexo, pero se trata más que de darle un orgasmo, muéstrale que te importa poniendo atención a todo su cuerpo, en vez de apurarte por tener sexo y comenzar con el coito, enfócate en sus muslos y bajo vientre, haz un círculo mental 5 cm alrededor de su vagina y no cruces esa línea mientras la besas, lames y acaricias, escribe la escritora Gloria Brame, autora del libro Different Loving, ya que así estimularás sus terminaciones nerviosas y la llevarás al clímax. El sexo debe ser descubrimiento, no el destino final. El sexo enfocado sólo en el coito no es sexy.
Recuerda: si ella está satisfecha, tenderá más a abrazarte y acariciarte, ahora piensa si eso no es lo más te gusta.
