El Dr. Roberto de la Fuente Rodríguez, jefe del módulo de Salud Mental del Instituto Mexicano del Seguro Social, explicó que el trastorno de déficit de atención se presenta aún cuando el niño no es hiperactivo.
El déficit de atención puede provocar deserción escolar, embarazo adolescente y los hace más susceptibles a adicciones, y es que en México, 5 % de los niños en edad escolar presentan este mal, que de no tratarse a tiempo desarrolla complicaciones como ansiedad y depresión en la adolescencia.
El déficit de atención implica una alteración en el neuro-desarrollo que se manifiesta por falta de atención e impulsividad, afecta de manera significativa el aprendizaje, no sólo en el aspecto académico, sino en aspectos de la vida cotidiana y puede ser un riesgo para desarrollar problemas a temprana edad, por la falta de un adecuado juicio crítico.
Los menores con este padecimiento obtienen calificaciones bajas en la escuela, tienen conflictos con sus compañeros y maestros, no terminan sus tareas escolares, se accidentan y pierden sus pertenencias, además, pueden presentar un comportamiento negativo y desafiante, incluso conductas antisociales.
El 80 % de las causas de este padecimiento pueden ser hereditarias, mientras que el 20 % restante se debe a factores perinatales, como haber presentado sufrimiento fetal.