Un nuevo estudio en el que participó el Dr. David Comer Kidd, del Nuevo Centro de Investigación Social de Nueva York, en EUA, revela que las habilidades sociales se potencian en las personas que leen ficción literaria. Los autores compararon los resultados obtenidos para personas que leen este género con lectores de no ficción y no lectores.
Las lecturas de este género ayudan a las personas a identificar mejor las emociones ajenas.
Según la investigación, este tipo de literatura permite apreciar el mundo desde otros puntos de vista e identificarse con los personajes, lo que afecta positivamente al desarrollo de las habilidades sociales.
Durante el estudio los investigadores dividieron a los participantes en tres grupos. Uno de ellos recibió un texto de ficción, otro uno de no ficción y el último ninguna lectura. Los investigadores seleccionaron las obras según los premios que habían recibido.
Seleccionaron extractos de los primeros capítulos de algunos libros que fueron finalistas de los Premios Nacionales de Novela o best sellers y algunas historias cortas de la colección de ganadores del Premio Henry en el año 2012.
La novela de ficción supone un desafío para las convicciones de los lectores y les fuerza a penetrar en la mente de los personajes, los expertos hicieron tres pruebas posteriores, basadas en la Teoría de la Mente, que refleja el grado en que un individuo es capaz de percibir las emociones y los pensamientos de los demás.
El hallazgo más importante es que una simple lectura corta de ficción literaria conlleva un incremento inmediato en los resultados de los test de la Teoría de la Mente, este efecto fue igual de palpable en las personas que ya estaban familiarizadas con este tipo de textos y en aquellas que no solían leerlos.
Las personas que leen ficción literaria calibran los sentimientos de los demás con mayor precisión en comparación con los que leen no ficción, ficción popular, o nada en absoluto.
El trabajo pone de manifiesto el valor de la ficción literaria a la sociedad y recalca sus implicaciones en los debates sobre la necesidad de las humanidades y las artes en las escuelas. Los resultados del estudio se publicaron en la revista Science.