Argentina, Venezuela y Brasil ocupan el ranking de los países con mayor demanda de cirugías estéticas en Latinoamérica. Los avances son continuos y la obsesión por la perfección, en algunos casos, llega a ser extrema. Ya no son sólo los famosos quienes recurren al bisturí: cada vez son más los que se someten a cirugías y tratamientos sin límites.
El dato llama la atención: Cada vez más jóvenes tanto hombres como mujeres se someten a estas prácticas.
En los últimos cinco años, esta tendencia creció no solo entre las mujeres sino también en hombres y adolescentes. El aumento en la demanda de las cirugías plásticas ha hecho su explosión, especialmente, en el sector masculino.
Pero, si bien se amplió el género, también se extendió el rango de edades. A pesar de que el sector que más consulta va entre los 30 y 55 años, actualmente el límite de edades se corrió hacia un grupo que oscila entre los 15 y los 85 años. Un fenómeno que llama fuertemente la atención es la creciente consulta de mujeres entre 65 y 85 años, no tan inclinadas a las cirugías, pero sí con una gran adicción a los tratamientos, que en la actualidad son muchos y de los más variados.
En lo que respecta a las mujeres y abarcando todas las edades, la que lidera el ranking de cirugías es la de aumento de mamas. En las mujeres jóvenes sigue la lipoaspiración y el tercer lugar se comparte entre la rinoplastia (operación de nariz) y una lista interminable de tratamientos de piel.
Las mujeres de mediana edad acuden mucho a la abdominoplastía (reducción de abdomen), especialmente en el post embarazo, el mini lifting y la lipoescultura, las mujeres de mayor edad recurren mucho a las cirugías de reposicionamiento de los tejidos: lifting facial, blefaroplastia (párpados), dermolipectomia de piernas (lifting de piernas) y también reducción de brazos y abdomen. También se someten a una interminable cantidad de tratamientos que ayudan al rejuvenecimiento de la piel y disminución de arrugas con infiltraciones de Botox o acido hialurónico.
Los hombres son fanáticos de la lipoescultura, la cirugía de párpados y el retoque de la papada con mentón. Muchas veces, la adicción a la cirugía está íntimamente ligada a un trastorno de la personalidad. Es responsabilidad del médico cirujano orientar al paciente a una psicoterapia y explicarle que, cuanto más mute su cuerpo, mas insatisfacción va a autogenerarse.
Los nuevos tratamientos con plasma propio, factor de crecimiento o radiofrecuencia, han sido muy exitosos e innovadores
-La radiofrecuencia produce excelentes resultados efecto lifting en cuello, rostro y brazos.
-Los rellenos de ácido hialurónico rehidratan la piel desde adentro, dando un aspecto sumamente saludable y joven.
-Los nuevos peelings, logran que la piel luzca mucho mejor.
-Los láseres borran cicatrices de acné y rejuvenecen la piel multiplicando el colágeno cientos de veces.
Existe una infinita gama de tratamientos de medicina estética. La clave está en elegir con responsabilidad el cirujano idóneo. La cirugía plástica existe para armonizar, embellecer y rejuvenecer. Lo importante es no traspasar el punto justo de equilibrio y la dosis de naturalidad que hace de ella una herramienta para lograr el ideal de belleza que cada uno desea.