Una parafilia es un patrón de comportamiento sexual en el que la fuente predominante de placer no se encuentra en la cópula, sino en alguna otra cosa o actividad que le acompaña. Suelen, aunque no necesariamente, suceder principalmente porque la persona que las practica ya ha tenido una cantidad muy elevada de placer sexual, y llega un momento en que poco la satisface y quiere más y más de aquella actividad para sentir el orgasmo o excitarse. En ocasiones se habla de perversión cuando se trata de conductas depravadas o corruptas, a continuación 10 parafilias:
Amiquesis: Excitación producida al rascar a la pareja durante el acto sexual
Amokoscisia: Excitación por el deseo de castigar a la pareja sexual
Anastimafilia: Atracción sexual por las personas obesas
Basoexia: Excitación producida únicamente por los besos
Biandria o bivirismo: Relación sexual entre una mujer y dos hombres
Coitolalia: La excitación sexual se produce al hablar durante el acto sexual
Doogging: Excitación sexual al ser observados practicando sexo al aire libre o en el auto
Peodeictofilia o Peodeiktofilia: El placer sexual se obtiene al provocar sorpresa, desmayo, shock o pánico en un desconocido tras la exhibición ilícita del pene
Pigofilia o pigotripsis: Placer sexual producido por el contacto o roce con las nalgas
Tragolimia: Deseo sexual compulsivo sin tener en cuenta el atractivo de la pareja
Estos patrones sexuales pueden incluir no sólo aspectos físicos sino objetos como ropa, lencería, uniformes, zapatos, etc…Para algunas personas la imaginación o los actos inusuales o extravagantes son necesarios para la excitación sexual.