Imagine sentirse físicamente enfermo cada vez que tenga un orgasmo, y que no se desee tener relaciones sexuales.
Investigaciones médicas suponen que 1 de cada 100 hombres pueden tener el Síndrome de la Enfermedad Post-Orgásmica (POIS por sus siglas en inglés).
Así lo considera el especialista Marcel Waldinger, profesor de psicofarmacología sexual en la Universidad de Utrecht en Holanda, quien supone que el número puede ser mayor pues algunos hombres llegan a sentir vergüenza de admitir que tienen un problema de este tipo.
Los síntomas son psicológicos y físicos. Algunos de los síntomas psicológicos incluyen ansiedad, irritabilidad, disfunción cognitiva, que puede incluir dificultad para concentrarse, recordar las palabras, o socializar, y tener sueños aterradores.
Los síntomas físicos consisten en fiebre, secreción nasal, dolor de cabeza ,náuseas, dolor de espalda, dolor muscular y síntomas de tipo alérgico, incluyendo picazón en los ojos, estornudos, hinchazón de los labios y la garganta y urticaria.
Los investigadores han sugerido que el Síndrome de la Enfermedad Post-Orgásmica, es causado por desequilibrios químicos o falta de testosterona. Recientemente investigadores holandeses descubrieron que los hombres que tienen el Síndrome de la Enfermedad Post-Orgásmica pueden ser alérgico a su propio semen.
Algunos pacientes con el Síndrome de la Enfermedad Post-Orgásmica tratan de evitar el sexo por completo, pero otros han tenido éxito con los antiinflamatorios no-esteroides. Los científicos holandeses han tenido éxito con la hiposensibilización o inmunoterapia alergénica, donde se da al paciente una dosis diluida de su propio semen durante un período prolongado para desensibilizarlo al mismo.