El tai chi ayuda a pacientes con Enfermedad de Parkinson

En tiempos más recientes se considera al Tai Chi una práctica físico-espiritual, que es muy provechosa para la salud

Los movimientos lentos y  controlados del tai chi pueden ayudar a combatir los problemas de equilibrio en las personas con enfermedad de Parkinson leve a moderada, y esas mejoras persisten por al menos tres meses, según revela un pequeño estudio realizado por el Dr. Fuzhong Li, del Instituto de Investigación de Oregon en Eugene, EUA.

Comparado con personas que realizaron ejercicios de estiramiento, quienes practicaron tai chi registraron menos caídas, zancadas más largas y mejor equilibrio, hallaron los investigadores.

El tai chi es muy bueno para solucionar el problema que enfrentan los pacientes con enfermedad de Parkinson comenta el Dr. Fuzhong Li, los resultados del estudio fueron publicados en New England Journal of Medicine.

No elimina los síntomas, no es un fármaco, no puede curar la enfermedad, pero puede desacelerar el avance de la enfermedad, el tai chi ayuda a mejorar la fuerza y reducir las caídas en los adultos mayores.

El Dr. Li y sus colegas enviaron a 195 adultos a una de tres clases dos veces por semana durante una hora, todos los pacientes podían sostenerse sin ayuda, aunque algunos necesitaban un dispositivo para ayudarse a caminar, en un segundo grupo se usó entrenamiento de la resistencia para fortalecer los músculos importantes para la postura y el equilibrio.

Y el tercer grupo recibió clases de estiramiento. Las personas de los tres grupos comenzaron con registros similares de 64 puntos en una escala de 100 que medía cuánto podían inclinarse o cambiar su centro de gravedad sin caerse.

La distancia del paso, la velocidad al caminar, el movimiento de las rodillas y otros indicadores también mejoraron, el grupo tratado con tai chi sufrió sólo 62 caídas durante el entrenamiento, menos de la mitad que los otros grupos. A los tres meses de la finalización de las clases, algunos beneficios se mantuvieron. Esta es la primera vez que un estudio puede demostrar algo de durabilidad de un tratamiento para mejorar el equilibrio.

Fuente: New England Journal of Medicine 

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