Duelo: perder a un ser querido, es una experiencia dolorosa.

La perdida de un ser querido es una de las experiencias más dolorosas para todo ser humano.

La perdida de un ser querido es una de las experiencias más dolorosas para todo ser humano.

Sin embargo, todos llegaremos tarde o temprano a experimentarla, y debemos hacerle frente, puede tratarse de un amigo, un hermano, un padre o el cónyuge.

Tras la muerte de un ser querido, sobreviene un periodo de tristeza y angustia, esta etapa recibe el nombre de duelo.

Las emociones que se pueden experimentar durante esta etapa pueden ser variadas, aunque la muerte ya se hubiera esperado:

Algunos de estos sentimientos pueden ser:

* negación
* incredulidad
* confusión
* rabiahumillación
* desesperación

Estas emociones son normales y comunes ante la pérdida.

Muchas personas no están preparadas para la intensidad y duración de estas emociones. Lo mejor es consultar a un especialista en psiquiatría, que podrá incluso administrar ciertos fármacos para que usted pueda transitar por esta etapa con mayor facilidad. El especialista estará facultado para darle terapia psicológica de ser necesario.

Algunas recomendaciones que pueden ayudarle son:

* Tratar de no escuchar música triste o bien que le recuerde a la persona que perdió.
* Realizar de manera normal sus actividades cotidianas.
* Realizar ejercicio, aunque no sienta ganas, recuerde que al hacer ejercicio, usted libera endorfinas, necesarias para contra-restar el estrés y la tristeza.

Busque grupos de apoyo, si es religioso puede acudir a una iglesia, pero no se quede solo, recuerde que una experiencia de este tipo si no se trata adecuadamente se puede convertir en depresión.

Busque grupos de apoyo, si es religioso puede acudir a una iglesia, pero no se quede solo, recuerde que una experiencia de este tipo si no se trata adecuadamente se puede convertir en depresión.

Los especialistas señalan que la muerte de un ser querido es una de las experiencias más dolorosas, que debe superarse en un lapso no mayor de 2 años, si después de este tiempo la persona no supera el dolor y este le hace modificar su conducta de manera negativa, es necesario acudir con un psiquiatra, para recibir tratamiento.

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